martes, 17 de noviembre de 2009

Chiclayo en el corazón: Los Mochicas del Perú cumplen 50 años

La voz de Guitarrón, la voz de diablo, la que tuvo por inspiración y maestro al canto de los chiroques, los huerequeques, los chiscos: la voz de Nicolás Seclén Sampén, líder y fundador del legendario trío chiclayano Los Mochicas del Perú, ha cumplido medio siglo cantando y haciendo bailar a su pueblo, que hoy lo aplaude de pie.

Cuenta la historia que la Iglesia Católica, al establecerse en el Perú, determinó cuáles serían los bailes y danzas que permitiría, excluyendo a aquellas que consideraba más cerca al infierno que al cielo. En la cultura norteña, dichas partituras musicales se transmitieron oralmente de generación en generación y sirvieron como fuente de inspiración para los cantores populares, quienes las eternizaron con la ayuda del arpa, el pianito, la guitarra y un buen poto de chicha de jora, bálsamo infaltable e inspirador de versos.


Los Mochicas, con su líder histórico don Nicolás Seclén Sampén, han bebido de estas fuentes musicales. Son ellos quienes tomaron como suya la tarea de difundir la cultura norteña a través de valses, marineras, tristes, pero sobre todo en el género musical llamado Golpe tierra. Este baile, propio de Lambayeque, es considerado como un antecesor del tondero, el cual para muchos estudiosos constituye uno de los ritmos nativos de mayor data en nuestro país.


La aparición del trío se produjo en 1955, cuando se realiza en Lambayeque un concurso para escoger al mejor conjunto de música popular, auspiciado por la marca de chocolates Mayascán. Es ahí donde Seclén, junto a José Arbulú y Antonio Medina Ramírez, obtienen el segundo lugar, ya bautizados como el trío Los Mochicas por el periodista y profesor chiclayano Alfonso Tello Marchena. Este logro significó un impulso para la incipiente carrera del trío. Vinieron los contratos en Chiclayo y alrededores, siempre en la pujante esquina de 7 enero con Pedro Ruiz, “la pampa del hambre”, donde se iba forjando la leyenda del “cholo Guitarrón”, como siempre se conoció a don Nicolás Seclén.


La llegada a Lima era inevitable, y esto ocurriría a mediados de 1958. Los Mochicas encontraron en Lima una dura plaza, dominada por los clásicos conjuntos criollos de la época. Sin embargo, luego de firmar con el sello Odeón, el trío norteño comienza a imponer un estilo propio conocido luego como “criollismo a la norteña”. Valses, polcas, marineras, tonderos, pasillos y serranitas se registraron en más de 30 long play para Iempsa, Virrey y Sono Radio, alternadas con innumerables jaranas, desde el hogar más humilde, hasta el mismísimo Palacio de Gobierno. Uno de los aspectos que popularizó al trío liderado por Seclén, fue el uso de instrumentos netamente chiclayanos, tales como el tiple, similar a la guitarra pequeña y de voz aguda; el pianito, similar al organillo nacido en Italia; y el banyo, adaptación de los peruanos al instrumento original de los Estados Unidos.


Compositores como Emilio Santisteban Niño, Germán García, Pedro Augusto Bocanegra, Abelardo Núñez, entre otros, apreciaron la cadencia de estos instrumentos en compás con la voz de Seclén, para componer un sinfín de canciones. Es así que se impusieron éxitos como “Tierra del guayacán” “Las alforjas”, “Hasta el muelle”, “La veguera”, “Suspirando te llamé”, “La chongoyapana” y el popular “Chiclayo de mis amores”, considerado como himno de la ciudad. Todos con el aporte de un Nicolás Seclén en su rol de compositor, siempre preocupado por los temas vinculados a su amada tierra natal. Al compás de estos éxitos, Los Mochicas recorrieron el Perú como artistas exclusivos de Ron Pomalca, logrando reconocimientos y homenajes, como los de la Municipalidades de Lima y Chiclayo, Illimo los clubes departamentales de Monsefú y Lambayeque, así como del Congreso de la República, entre muchas otras.


Era momento de que el mundo se sume al reconocimiento. La oportunidad llegaría en junio de 1992, durante las celebraciones por el V Centenario del Descubrimiento de América. Los Mochicas fueron invitados especiales a la Feria de Sevilla, España, donde ofrecieron una actuación en el auditorio de La Cartuja, alternando con Plácido Domingo, quien no dudó en elogiar el timbre vocal -en sol mayor- de Nicolás Seclén. El encuentro se prolongó hacia los estudios de Radio TV España, donde Los Mochicas también fueron agasajados por la colonia peruana.

Han integrado el grupo, posteriormente, Alfonso Zárate y Francisco Miranda Montero en la guitarra; cajoneros como Natividad Olivos y Reynaldo “Canano” Barnechea, sin dejar de mencionar a Germán Neciosup y Luis Sandoval, alternando con el saxofón. Actualmente el grupo está integrado por Ricardo Seclén Santisteban, hijo de don Nicolás, y Salvador Santisteban como cajón y segunda voz.

Las celebraciones por las Bodas de Oro del grupo empezaron fuera de casa. Recientemente, Los Mochicas fueron nombrados padrinos artísticos en la Peruvian Parade Inc, realizada en la ciudad de Paterson, New Yersey, como parte de la celebración de nuestras fiestas patrias. Nicolás Seclén fue homenajeado por la numerosa colonia de compatriotas residentes en EEUU. En Lima, están a la expectativa del reconocimiento del Instituto Nacional de Cultura, así como de una próxima ceremonia de homenaje por parte del Gobierno Regional de Lambayeque.

Como vemos, Los Mochicas siguen vigentes pese a haber superado ya los 50 años de difusión del folklore chiclayano, tanto en su música como en sus costumbres.

A continuación, los dejamos con "La cholita del puente", uno de los valses más celebrados de Los Mochicas.

martes, 10 de noviembre de 2009

Bienvenidos

Los Mochicas del Perú, legendario trío norteño fundado por Nicolás Seclén Sampén, han cumplido 50 años de vida artística en distintos escenarios del Perú y del extranjero. Chiclayanos de pura cepa, Los Mochicas se mantienen vigentes en la difusión del folklore lambayecano, siempre con la alegre dirección de Nicolás Seclén (primera voz), acompañado ahora por Salvador Santisteban (percusión) y Juan Girón Vásquez (banyo).

A la vanguardia de las nuevas tecnologías, Los Mochicas del Perú le ofrecen la más sincera bienvenida a este nuevo espacio, en el cual buscamos compartir con los lectores distintos aspectos de nuestro folklore norteño, así como mantenerlos al tanto de las distintas actividades del grupo.

Achica, achica...¡Mochica!